En el pecado va la penitencia


Ay cosas en la vida en que presumo de ser práctica, pero en la mayoría de mis cosas la practicidad no se me da, por mucho que lo intente.
Me encandilo fácilmente por los empaques… ah, qué bellos pueden ser, tanto que siento feíto cuando hay que abrirlos para sacar su contenido. Y si, es tan notorio mi gusto por cómo se ven las cosas que, definitivo, lo mío no fue la Gestalt. Es tanta mi manía por ello que mis hermanos ya saben que si me piden elegir, seguro decidiré por lo más agradable visualmente hablando, aunque no sea muy bueno en función.
Hace no mucho compré una compresora para mi auto. Soy del tipo de mujer que ama las herramientas; tenía de todo, taladro, caladora, lijadora, juegos completos de herramientas, cortazulejos, así que en el auto, además de gato hidráulico, decidí tener la mentada compresora. Y ahí va señorita ensoñaciones, llegué al súper y fui directo a la sección de herramientas; inmediatamente vi, en medio de todo, una hermosa compresora color verde lima en plástico traslucido, era bella. A pesar de que leí y comparé las características del producto y, en eso, la pobre compresora objeto de mi deseo quedaba más que mal parada, la compré. El único día que quise usarla, tardé como una hora en inflar un poco una de las llantas que estaba solamente baja. Así que cuando abrieron mi auto y se volarón mi herramienta, al menos me dio gusto saber que la compresora que se llevaron defraudaría al siguiente dueño.
Y es que no sé si es superficialidad la mía, pero me pasa que hay objetos que te gritan ¡úsame! Por ejemplo, el otro día me encontré una salsera que tenía JL, por si algún día había una reunión… Y ahora se ve hermosa como maceta de mi pata de elefante.
Así que sí, también es común encontrar en mi espacio objetos con usos muy distintos para los que fueron creados; pero si no hiciera esto para mí la vida sería aburridísima. Para mí, el espacio personal debe ser un reflejo de uno mismo, dice tantas cosas de quien lo habita, que por eso también otra de mis grandes pasiones es caminar y asomarme por las puertas o ventanas que dejan abiertas, hay todo un mundo lleno de historias por imaginar y contae en cada una de esas vistas.

*Gestalt. Escuela que nace en Alemania, en la que la premisa para diseñar es: la función hace la forma.

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